Fairlight

Fairlight es sin duda una de las mejore aventuras realizadas para el ZX Spectrum. Editado en 1985 sería convertido al Amstrad CPC y al Commodore 64 en 1986 convirtiéndolo en un clásico en toda regla. Su dificultad y acabado es comparable, y en algunos aspectos superior incluso al aclamado Knight Lore.

Encarnamos a Isvar y tenemos que encontrar el «Libro de la Luz» para devolvérselo a un poderoso mago. Nos movemos en un castillo y su entorno en una ambientación realizada con Filmation que incluye importantes novedades respecto a otros juegos que usan esta técnica como Batman.

Nos encontramos con objetos ocultos debajo de otros o que no se ven y que para cogerlos tienes que empujarlos desde lejos; comida que buscar entre las habitaciones para recuperar vida; localizar a los temibles monjes y los crucifijos con los que eliminarlos.

Los objetos dejan de ser simples elementos sobre los que saltar o empujar. Aquí tienen su peso y su inercia. Los puedes coger y llevarlos entre las distintas pantallas del juego sin problemas.

Hay muchos artefactos que se pueden encontrar y los puzzles consisten principalmente en el descubrimiento de sus usos. Ten en cuenta el peso de lo que cargas ya que te limitarán en la rapidez de movimientos.

Fairlight engancha. Es de esos juegos que necesitas horas para acabarlos por su complejidad; pero ese es precisamente su encanto. Un mundo lleno de posibilidades que se adelantaron a su tiempo y con una dificultad muy alta que te obliga a usar rapidez de movimientos con muy buenas dosis de paciencia y estrategia.

La versión de Commodore 64 es en el aspecto gráfico idéntica a la de Spectrum pero con unos gloriosos efectos sonoros y una música espectacular. La versión de Amstrad sale peor parada ya que los colores elegidos para muchas pantallas no son los más apropiados y un sonido demasiado estridente.

Sea cual sea la versión que juegues te dará horas de diversión. Funciona sin problemas en todos  los emuladores así que ¿a qué esperas?.